miércoles, 20 de abril de 2011
Vertido en el Golfo de México: un año después
martes, 12 de abril de 2011
Valentina Tereshkova primera mujer cosmonauta.
En1963, Valentina Tereshkova se convirtió en la primera mujer cosmonauta (dos años después del primer hombre). Y no sólo eso: dio 48 vueltas alrededor de la Tierra durante tres días, algo que ningún astronauta había hecho. Eran años de guerra fría; sin embargo, la hazaña de Tereshkova, conocida en el mundo como la dama del espacio, ha logrado permanecer, a pesar del tiempo y de la falta de reflectores.
Sus comienzos y la hazaña
Valentina nació en marzo de 1937 en una familia campesina con tan pocos recursos que la niña asistió a la escuela por primera vez a la edad de 10 años, cuando se trasladó a Volga de Yaroslavl. Siendo una adolescente trabajó como obrera en una fábrica de telas y por las noches estudiaba la secundaria. Valya, como le decían de cariño, era una chica sana, deportista y muy audaz, tanto, que practicaba el paracaidismo en un club aéreo de aficionados.
En diciembre de 1961, una comisión que recorría los clubes con el objeto de seleccionar paracaidistas que prepararía para los vuelos espaciales la eligió, a pesar de que era más joven que otros aspirantes y poseía menos experiencia... y de que era mujer. Sus dotes para el paracaidismo y su extraordinaria resistencia física durante los entrenamientos impresionaron.
Valya aceptó y comenzó a estudiar matemáticas, meteorología, astronomía, física, computación y navegación espacial, y se sometió al entrenamiento físico -el obstáculo más duro- para habituarse a la ausencia de gravedad en el espacio, así como en la práctica de diversos tipos de actividades y en la manipulación de aparatos.
Cada jornada laboral comenzaba a las nueve de la mañana. Un grupo de chicas que vivía en el Centro de Preparación de Cosmonautas, prolongaba su preparación más allá de las 15 horas de clases; "mientras ellos se iban a descansar, continuábamos con la preparación física y con especialistas de institutos académicos que nos dictaban charlas. Las aspirantes a cosmonautas "girábamos por diez', como denominábamos a las diez unidades de sobrecarga; tu peso de 60 kilos se convertía en 600 en la centrífuga".
El 16 de junio de 1963, a las 12 horas y 30 minutos, Vostok-6 despegó del cosmódromo tripulado por Valentina, de 26 años, quien tenía como señal la gaviota (chaika, en ruso).
Su primer mensaje fue: "Aquí Gaviota. Veo el horizonte, una banda azul claro. Ahí está la Tierra, ¡qué hermosa es! Todo marcha espléndidamente". Valentina condujo la nave durante 71 horas, es decir, tres días, suficientes para superar en 50% el tiempo general sumado de todos los astronautas norteamericanos que habían circunvolado el planeta.
Además de controlar la nave, Valentina estaba atenta al comportamiento del organismo femenino en vuelo espacial. De hecho, existía un programa de largo plazo en el que participarían más mujeres cosmonautas, e incluso una tripulación femenina se preparaba ya para volar en una nave de tres plazas. Sin embargo, el proyecto fue suspendido y, muy a la usanza de los entonces dirigentes de la URSS, el asunto se rodeó de silencio hasta caer en el olvido. Hoy se dice que los resultados no convencieron como para continuar con esto; seguramente hubo otras prioridades y las mujeres decidieron aguardar.
Pasarían 20 años para que otra mujer repitiera esa hazaña: en agosto de 1982 otra rusa, Svetlana Savitskaja, viajó en la nave Soyuz T-7.
Mucho más por hacer
Cinco meses después de su histórica misión se casó con el astronauta Andrian Nikolaiev, con quien procreó una hija. La "bebé espacial" fue sometida a numerosos exámenes, dado que sus padres eran astronautas, pero finalmente se comprobó que era normal. Mucho se ha hablado también que el matrimonio fue decidido por el dirigente soviético de entonces, Nikita Kruschov, a quien se le antojó armar un "matrimonio cósmico". Aunque Valentina nunca ha dicho nada al respecto, años más tarde sobrevino el divorcio.
Después del vuelo, Tereshkova fue nombrada héroe de la URSS" -que debiera ser
"heroína" por mínimo respeto al género- y distinguida con la Orden de Lenin. Siguió adscrita al programa espacial; obtuvo rangos militares hasta llegar a general mayor, y se graduó doctora en Ciencias Técnicas y Sociales.
Más adelante encabezó numerosas organizaciones en su país, desde el Comité de Mujeres Soviéticas, hasta el Centro Nacional de Cooperación Internacional y Cultural, adjunto al gobierno de Rusia, y ocupó diversos cargos.
Después de cumplir los 60 años, Valentina dejó el destacamento de cosmonautas y ha recibido condecoraciones superiores por parte de muchos países del mundo. Recientemente fue distinguida por una asociación internacional de Londres como "La mujer del siglo XX".
Si bien se conoce muy poco de la vida privada de Valentina, quien hoy tiene 65 años, lo cierto es que mientras los astronautas varones gozan de fama, escriben libros, entran y salen de clínicas para superar su alcoholismo, y dan entrevistas sobre sus glorias pasadas, ella continúa mostrando resistencia y tenacidad en el trabajo diario como defensora de la causa feminista.
http://www.comunamujer.com/valentina-tereshkova/contenido/74/
http://www.comunamujer.com/
Sus comienzos y la hazaña
Valentina nació en marzo de 1937 en una familia campesina con tan pocos recursos que la niña asistió a la escuela por primera vez a la edad de 10 años, cuando se trasladó a Volga de Yaroslavl. Siendo una adolescente trabajó como obrera en una fábrica de telas y por las noches estudiaba la secundaria. Valya, como le decían de cariño, era una chica sana, deportista y muy audaz, tanto, que practicaba el paracaidismo en un club aéreo de aficionados.
En diciembre de 1961, una comisión que recorría los clubes con el objeto de seleccionar paracaidistas que prepararía para los vuelos espaciales la eligió, a pesar de que era más joven que otros aspirantes y poseía menos experiencia... y de que era mujer. Sus dotes para el paracaidismo y su extraordinaria resistencia física durante los entrenamientos impresionaron.
Valya aceptó y comenzó a estudiar matemáticas, meteorología, astronomía, física, computación y navegación espacial, y se sometió al entrenamiento físico -el obstáculo más duro- para habituarse a la ausencia de gravedad en el espacio, así como en la práctica de diversos tipos de actividades y en la manipulación de aparatos.
Cada jornada laboral comenzaba a las nueve de la mañana. Un grupo de chicas que vivía en el Centro de Preparación de Cosmonautas, prolongaba su preparación más allá de las 15 horas de clases; "mientras ellos se iban a descansar, continuábamos con la preparación física y con especialistas de institutos académicos que nos dictaban charlas. Las aspirantes a cosmonautas "girábamos por diez', como denominábamos a las diez unidades de sobrecarga; tu peso de 60 kilos se convertía en 600 en la centrífuga".
El 16 de junio de 1963, a las 12 horas y 30 minutos, Vostok-6 despegó del cosmódromo tripulado por Valentina, de 26 años, quien tenía como señal la gaviota (chaika, en ruso).
Su primer mensaje fue: "Aquí Gaviota. Veo el horizonte, una banda azul claro. Ahí está la Tierra, ¡qué hermosa es! Todo marcha espléndidamente". Valentina condujo la nave durante 71 horas, es decir, tres días, suficientes para superar en 50% el tiempo general sumado de todos los astronautas norteamericanos que habían circunvolado el planeta.
Además de controlar la nave, Valentina estaba atenta al comportamiento del organismo femenino en vuelo espacial. De hecho, existía un programa de largo plazo en el que participarían más mujeres cosmonautas, e incluso una tripulación femenina se preparaba ya para volar en una nave de tres plazas. Sin embargo, el proyecto fue suspendido y, muy a la usanza de los entonces dirigentes de la URSS, el asunto se rodeó de silencio hasta caer en el olvido. Hoy se dice que los resultados no convencieron como para continuar con esto; seguramente hubo otras prioridades y las mujeres decidieron aguardar.
Pasarían 20 años para que otra mujer repitiera esa hazaña: en agosto de 1982 otra rusa, Svetlana Savitskaja, viajó en la nave Soyuz T-7.
Mucho más por hacer
Cinco meses después de su histórica misión se casó con el astronauta Andrian Nikolaiev, con quien procreó una hija. La "bebé espacial" fue sometida a numerosos exámenes, dado que sus padres eran astronautas, pero finalmente se comprobó que era normal. Mucho se ha hablado también que el matrimonio fue decidido por el dirigente soviético de entonces, Nikita Kruschov, a quien se le antojó armar un "matrimonio cósmico". Aunque Valentina nunca ha dicho nada al respecto, años más tarde sobrevino el divorcio.
Después del vuelo, Tereshkova fue nombrada héroe de la URSS" -que debiera ser
"heroína" por mínimo respeto al género- y distinguida con la Orden de Lenin. Siguió adscrita al programa espacial; obtuvo rangos militares hasta llegar a general mayor, y se graduó doctora en Ciencias Técnicas y Sociales.
Más adelante encabezó numerosas organizaciones en su país, desde el Comité de Mujeres Soviéticas, hasta el Centro Nacional de Cooperación Internacional y Cultural, adjunto al gobierno de Rusia, y ocupó diversos cargos.
Después de cumplir los 60 años, Valentina dejó el destacamento de cosmonautas y ha recibido condecoraciones superiores por parte de muchos países del mundo. Recientemente fue distinguida por una asociación internacional de Londres como "La mujer del siglo XX".
Si bien se conoce muy poco de la vida privada de Valentina, quien hoy tiene 65 años, lo cierto es que mientras los astronautas varones gozan de fama, escriben libros, entran y salen de clínicas para superar su alcoholismo, y dan entrevistas sobre sus glorias pasadas, ella continúa mostrando resistencia y tenacidad en el trabajo diario como defensora de la causa feminista.
http://www.comunamujer.com/valentina-tereshkova/contenido/74/
http://www.comunamujer.com/
domingo, 10 de abril de 2011
Llamado a la paz - Eduardo Galeano.
El escritor uruguayo Eduardo Galeano afirmó con respecto al conflicto libio que considera "hipócrita el llamado a la paz cuando proviene de países que vienen de la guerra". El letrado también afirmó que lo que se vive en el mundo árabe es "una hermosa llamarada de libertad" y reiteró que la independencia de América Latina es todavía "una tarea por hacer".
En entrevista exclusiva con TeleSUR, el también periodista indicó que no veía convincente el "llamado a la paz" que han hecho en los días recientes los países miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), pues "estos países, que gobiernan el mundo, no son solo partícipes de guerras, sino que son los mayores principales productores de armas".
En este mismo sentido, indicó que lo que está ocurriendo en Libia y en Medio Oriente es "una linda llamarada de libertad" y ratificó que es "una buena noticia para los que creen que no tenemos que resignarnos a los designios del destino".
"Yo no la veo como una crisis (la del mundo árabe), la veo como una linda llamarada de libertad que se va contagiando y extendiendo, partió pequeñita, chiquita, tenía el tamaño de un vendedor de frutas que fue humillado y a partir de allí se extendió hasta lo que es ahora".
Por otro lado, al ser cuestionado por el contexto actual de Suramérica, el autor del libro Las venas abiertas de América Latina afirmó que "la independencia es todavía una tarea por hacer" y agregó que la principal clave para alcanzarla es "aprender a ser originales".
Con esta afirmación, el autor rememoró al filósofo y educador venezolano Simón Rodríguez, a quien citó complementando que "no somos libres porque no somos dueños de nosotros mismos", con lo que criticó que Latinoamérica "quiere ser libre pero no se arriesga a copiar la originalidda y el ingenio".
"Para ser de veras independientes tenemos que ser capaces de caminar con nuestras piernas, pensar con nuestras propias cabezas y sentir con nuestros propios corazones", sostuvo.
Agregó que Rodríguez "sí era un verdadero maestro" y aseguró que uno de sus más grandes legados es que fue el creador de la primera escuela donde "se mezclaba" lo que hasta ese entonces era opuesto: los niños con las niñas, los negros con los blancos, y sobre todo: el trabajo manual con el intelectual.
En este sentido, ratificó que "Don Simón ató las dos cosas: la cabeza y el cuerpo (...) enseñaba a sumar y restar, leer y escribir pero también a usar las manos para las tareas de la carpintería, herrería, barro y tierra" y saludó que "él dignificó el trabajo manual".
Por último explicó que para él el lenguaje verdadero y que más enseña es "el sentipensante", que definió como "el único que no miente" porque no desvincula el cerebro del corazón.
En este punto, advirtió que "si uno piensa sólo con el cerebro puede llegar a ser frígido y si piensa sólo con el corazón puede llegar a ser cursi", por ende, hizo un llamado para promover "la cultura sentipensante, que es la que no divorcia al ser humano por dentro".
"Hay que luchar contra 'la cultura del desvínculo', que no sólo separa la razón del corazón, el pasado del presente y la vocación del trabajo; sino que también nos separa entre nosotros mismos, como islas condenadas a la soledad", exclamó.
Concluyó afirmando que el mundo "sigue siendo un escenario que a veces duele mucho y otras veces alegra" y recalcó que lo grandioso del ser humano es que es igual de variante y que "así como hay veces que nos decaemos, hay otras oportunidades que nos sentimos capaces de inventar el futuro y de crearlo de nuevo".
Eduardo Galeano es un escritor y periodista uruguayo nacido en 1940 cuyas obras son famosas en muchos lugares del mundo. Sus textos más conocidos Memoria del fuego (1986) y Las venas abiertas de América Latina (1971) han sido traducidos a veinte idiomas.
Mediante géneros que combinan el análisis político, la historia, el documental y el periodismo, el cronista ha plasmado y descrito la sociedad contemporánea; con especial énfasis en las contrariedades reales existentes en la pobreza, la miseria moral y material, la hipocresía de un mundo y el mercantilismo.
Fuente: TeleSur
En entrevista exclusiva con TeleSUR, el también periodista indicó que no veía convincente el "llamado a la paz" que han hecho en los días recientes los países miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), pues "estos países, que gobiernan el mundo, no son solo partícipes de guerras, sino que son los mayores principales productores de armas".
En este mismo sentido, indicó que lo que está ocurriendo en Libia y en Medio Oriente es "una linda llamarada de libertad" y ratificó que es "una buena noticia para los que creen que no tenemos que resignarnos a los designios del destino".
"Yo no la veo como una crisis (la del mundo árabe), la veo como una linda llamarada de libertad que se va contagiando y extendiendo, partió pequeñita, chiquita, tenía el tamaño de un vendedor de frutas que fue humillado y a partir de allí se extendió hasta lo que es ahora".
Por otro lado, al ser cuestionado por el contexto actual de Suramérica, el autor del libro Las venas abiertas de América Latina afirmó que "la independencia es todavía una tarea por hacer" y agregó que la principal clave para alcanzarla es "aprender a ser originales".
Con esta afirmación, el autor rememoró al filósofo y educador venezolano Simón Rodríguez, a quien citó complementando que "no somos libres porque no somos dueños de nosotros mismos", con lo que criticó que Latinoamérica "quiere ser libre pero no se arriesga a copiar la originalidda y el ingenio".
"Para ser de veras independientes tenemos que ser capaces de caminar con nuestras piernas, pensar con nuestras propias cabezas y sentir con nuestros propios corazones", sostuvo.
Agregó que Rodríguez "sí era un verdadero maestro" y aseguró que uno de sus más grandes legados es que fue el creador de la primera escuela donde "se mezclaba" lo que hasta ese entonces era opuesto: los niños con las niñas, los negros con los blancos, y sobre todo: el trabajo manual con el intelectual.
En este sentido, ratificó que "Don Simón ató las dos cosas: la cabeza y el cuerpo (...) enseñaba a sumar y restar, leer y escribir pero también a usar las manos para las tareas de la carpintería, herrería, barro y tierra" y saludó que "él dignificó el trabajo manual".
Por último explicó que para él el lenguaje verdadero y que más enseña es "el sentipensante", que definió como "el único que no miente" porque no desvincula el cerebro del corazón.
En este punto, advirtió que "si uno piensa sólo con el cerebro puede llegar a ser frígido y si piensa sólo con el corazón puede llegar a ser cursi", por ende, hizo un llamado para promover "la cultura sentipensante, que es la que no divorcia al ser humano por dentro".
"Hay que luchar contra 'la cultura del desvínculo', que no sólo separa la razón del corazón, el pasado del presente y la vocación del trabajo; sino que también nos separa entre nosotros mismos, como islas condenadas a la soledad", exclamó.
Concluyó afirmando que el mundo "sigue siendo un escenario que a veces duele mucho y otras veces alegra" y recalcó que lo grandioso del ser humano es que es igual de variante y que "así como hay veces que nos decaemos, hay otras oportunidades que nos sentimos capaces de inventar el futuro y de crearlo de nuevo".
Eduardo Galeano es un escritor y periodista uruguayo nacido en 1940 cuyas obras son famosas en muchos lugares del mundo. Sus textos más conocidos Memoria del fuego (1986) y Las venas abiertas de América Latina (1971) han sido traducidos a veinte idiomas.
Mediante géneros que combinan el análisis político, la historia, el documental y el periodismo, el cronista ha plasmado y descrito la sociedad contemporánea; con especial énfasis en las contrariedades reales existentes en la pobreza, la miseria moral y material, la hipocresía de un mundo y el mercantilismo.
Fuente: TeleSur
Eduardo Galeano: Entrevista especial (Parte 1/3)
jueves, 31 de marzo de 2011
31 de Marzo, Celebrando el legado de Cesar Chavez
miércoles, 30 de marzo de 2011
Producir y consumir de otra manera.
La actual sociedad de consumo, el hecho de que los ciudadanos vayan de compras simplemente por el placer de ir de compras y no para adquirir bienes o servicios necesarios para su día a día y duraderos, tiene los días contados. Este tipo de consumo está dopado por los bajos precios de los productos y la brutal competencia entre los fabricantes. Sin embargo, el constante aumento de los precios de la energía y de las materias primas necesarias para fabricar dichos productos obliga a llevar a cabo un cambio de estrategia industrial, a adoptar un modelo de fabricación que genere productos de mayor valor, más duraderos y cuyo impacto medioambiental sea el menor posible.
El acceso a una energía barata fue determinante para la expansión del consumo. Gracias a ella, a finales de los años 20, la producción de artículos de consumo pudo industrializarse y la fabricación a gran escala propició un descenso de los precios que inició el desarrollo de la actual sociedad de consumo. Los ciudadanos empezaron a consumir más por placer que por necesidad, y los fabricantes comenzaron a producir unos bienes no duraderos con el fin de mantener una demanda constante y aumentar año tras año sus beneficios.
Sin embargo, hoy en día, la humanidad se está dando cuenta de que los recursos de la tierra no son ilimitados. Los precios de las energías fósiles y de las materias primas son consecuencia de la escasez de los mismos y de los límites que la naturaleza impone al hombre. Además, la producción y el consumo desenfrenados están llenando el mundo de una basura que ya no sabemos cómo gestionar. Ha llegado el momento de revisar nuestra forma de diseñar y producir los objetos de consumo. La industria debe abandonar unos modelos basados en la obsolescencia programada y debe colaborar con el consumidor proporcionando unos bienes y servicios más fáciles de reparar, más duraderos, y apoyando la gestión y la reutilización de aquellos residuos que sean inevitables
Otro ejemplo de la reacción del consumidor es iFixit ("yoloarreglo"), una comunidad virtual que comenzó en el año 2003 cuando Luke y Kyle desmontaron un iBook y lograron arreglarlo sin un manual de instrucciones. Enfadados por la ausencia de un manual de instrucciones que facilitara la reparación por parte del usuario, estos dos jóvenes estadounidenses continuaron arreglando ordenadores portátiles, comprando otros averiados para extraer las piezas que necesitaban. Después, empezaron a vender ellos mismos las piezas y a crear manuales de instrucciones que todo el mundo podría utilizar, animando a la reparación con el mensaje de que resulta divertido y muy gratificante.
La iniciativa, que comenzó arreglando aparatos de la firma Apple, quiso extender su concepto a absolutamente todos los productos del mercado, para lo que abrió las puertas a la colaboración de los internautas. Su premisa, "Si no puedes abrirlo, no te pertenece", ha hecho que lo que empezó como una lucha particular se haya convertido en una comunidad virtual que, gracias a la colaboración de los lectores, muestra cómo reparar prácticamente todo.
Los diseñadores también están empezando a darse cuenta de la necesidad de trabajar por su cuenta, de no someterse a las exigencias de una industria avariciosa que está explotando los recursos naturales y llenando de basura el mundo.
De este modo, Repair-Ware es un proyecto que pretende fomentar la reparación de los pequeños electrodomésticos. La idea, del diseñador Samuel James Davies, es diseñar un aparato sencillo, que el usuario pueda desmontar y reparar de fácilmente para promover la cultura de la reparación.
http://www.ladyverd.com/index.htm
El acceso a una energía barata fue determinante para la expansión del consumo. Gracias a ella, a finales de los años 20, la producción de artículos de consumo pudo industrializarse y la fabricación a gran escala propició un descenso de los precios que inició el desarrollo de la actual sociedad de consumo. Los ciudadanos empezaron a consumir más por placer que por necesidad, y los fabricantes comenzaron a producir unos bienes no duraderos con el fin de mantener una demanda constante y aumentar año tras año sus beneficios.
Sin embargo, hoy en día, la humanidad se está dando cuenta de que los recursos de la tierra no son ilimitados. Los precios de las energías fósiles y de las materias primas son consecuencia de la escasez de los mismos y de los límites que la naturaleza impone al hombre. Además, la producción y el consumo desenfrenados están llenando el mundo de una basura que ya no sabemos cómo gestionar. Ha llegado el momento de revisar nuestra forma de diseñar y producir los objetos de consumo. La industria debe abandonar unos modelos basados en la obsolescencia programada y debe colaborar con el consumidor proporcionando unos bienes y servicios más fáciles de reparar, más duraderos, y apoyando la gestión y la reutilización de aquellos residuos que sean inevitables
Otro ejemplo de la reacción del consumidor es iFixit ("yoloarreglo"), una comunidad virtual que comenzó en el año 2003 cuando Luke y Kyle desmontaron un iBook y lograron arreglarlo sin un manual de instrucciones. Enfadados por la ausencia de un manual de instrucciones que facilitara la reparación por parte del usuario, estos dos jóvenes estadounidenses continuaron arreglando ordenadores portátiles, comprando otros averiados para extraer las piezas que necesitaban. Después, empezaron a vender ellos mismos las piezas y a crear manuales de instrucciones que todo el mundo podría utilizar, animando a la reparación con el mensaje de que resulta divertido y muy gratificante.
La iniciativa, que comenzó arreglando aparatos de la firma Apple, quiso extender su concepto a absolutamente todos los productos del mercado, para lo que abrió las puertas a la colaboración de los internautas. Su premisa, "Si no puedes abrirlo, no te pertenece", ha hecho que lo que empezó como una lucha particular se haya convertido en una comunidad virtual que, gracias a la colaboración de los lectores, muestra cómo reparar prácticamente todo.
Los diseñadores también están empezando a darse cuenta de la necesidad de trabajar por su cuenta, de no someterse a las exigencias de una industria avariciosa que está explotando los recursos naturales y llenando de basura el mundo.
De este modo, Repair-Ware es un proyecto que pretende fomentar la reparación de los pequeños electrodomésticos. La idea, del diseñador Samuel James Davies, es diseñar un aparato sencillo, que el usuario pueda desmontar y reparar de fácilmente para promover la cultura de la reparación.
http://www.ladyverd.com/index.htm
viernes, 25 de marzo de 2011
Semillas, el arma de nuestro futuro.
La biodiversidad es tan necesaria para la vida humana como el agua. De ella depende el futuro de nuestra alimentación. Los agricultores de todo el mundo han adaptado y cuidado durante siglos las semillas que luego proporcionarían los productos básicos para alimentar al mundo. Las semillas son el futuro y deben circular en libertad, ya que son la llave para luchar contra el hambre. La apropiación y monopolización de las semillas por parte de multinacionales es un acto de privatización de seres vivos que debería prohibirse de forma tajante. Buscar el beneficio mediante el secuestro de un bien común como son las semillas es algo que no debería permitirse. Sin embargo, las grandes compañías, amparadas por muchos gobiernos, están decididas a obtener el control sobre las semillas y prohibir aquellas variedades en poder de los campesinos y cuyo control se les escapa.
La posibilidad de disponer de semillas para nuestro uso se encuentra cada vez más amenazada por la privatización de los seres vivos. Esta privatización, que se lleva a cabo por grandes compañías multinacionales en muchas ocasiones amparadas por los gobiernos nacionales, no solamente está colaborando con la pérdida de la diversidad de flora y fauna, sino que también fomenta la desaparición de experiencias y conocimientos adquiridos durante tantos siglos por campesinos y agricultores. La red Soberanía sobre las Semillas (Seed Sovereignity) trata de buscar soluciones para recuperar y transmitir esos conocimientos a través del intercambio de experiencias, así como encontrar la forma de combatir unas leyes que, de ser impuestas, perjudicarían seriamente la conservación de la biodiversidad y la seguridad alimentaria. En el marco de las Jornadas Europeas de acción contra la legislación prevista por la UE para controlar la circulación de semillas, la asociación "Soberanía sobre las Semillas" (Seed Sovereignity) ha organizado un evento que pretende sentar las bases para crear una red internacional de intercambio de semillas. Esta red de intercambio se marca como objetivo reunir aquellas iniciativas de los diversos países que promuevan la difusión sin restricciones de las semillas seleccionadas. En ella se compartirán experiencias y se estrecharán los lazos entre los participantes. La red pretende luchar contra las leyes europeas, que prevén dificultar o prohibir el intercambio de semillas en un futuro. Para ello, los organizadores invitan a todas las asociaciones de lucha por la protección de la libertad de circulación de las semillas, pero también a jardineros, agricultores y a todas las personas interesadas en el tema, al evento, donde además podrán obtener variedades gratuitas de semillas.
El evento, que tendrá lugar en la ciudad de Bruselas el domingo 17 de abril de 2011, tratará la semilla como un elemento esencial para la alimentación y para la conservación de la biodiversidad. La organización del evento pretende ser un escaparate de ideas y experiencias, de debates, talleres… siempre en torno a la temática central de la semilla.
"Con este intercambio de semillas queremos llamar la atención sobre esta práctica que durante los últimos años está despareciendo en toda Europa y que podría ser declarada ilegal por las leyes de la UE", indica la organización. Activistas de la India, Turquía y otros países europeos expondrán la situación de las semillas en sus países y las posibles consecuencias de las nuevas leyes de semillas previstas por la EU.
Para aquellos interesados en formar parte de la nueva red internacional, el lunes 18 se celebrará un encuentro en el que se profundizará en la organización de la asociación.
Sobre el intercambio de semillas en España: Cultiva boodiversidad, siembra tus derechos
http://www.ladyverd.com/index.htm
La posibilidad de disponer de semillas para nuestro uso se encuentra cada vez más amenazada por la privatización de los seres vivos. Esta privatización, que se lleva a cabo por grandes compañías multinacionales en muchas ocasiones amparadas por los gobiernos nacionales, no solamente está colaborando con la pérdida de la diversidad de flora y fauna, sino que también fomenta la desaparición de experiencias y conocimientos adquiridos durante tantos siglos por campesinos y agricultores. La red Soberanía sobre las Semillas (Seed Sovereignity) trata de buscar soluciones para recuperar y transmitir esos conocimientos a través del intercambio de experiencias, así como encontrar la forma de combatir unas leyes que, de ser impuestas, perjudicarían seriamente la conservación de la biodiversidad y la seguridad alimentaria. En el marco de las Jornadas Europeas de acción contra la legislación prevista por la UE para controlar la circulación de semillas, la asociación "Soberanía sobre las Semillas" (Seed Sovereignity) ha organizado un evento que pretende sentar las bases para crear una red internacional de intercambio de semillas. Esta red de intercambio se marca como objetivo reunir aquellas iniciativas de los diversos países que promuevan la difusión sin restricciones de las semillas seleccionadas. En ella se compartirán experiencias y se estrecharán los lazos entre los participantes. La red pretende luchar contra las leyes europeas, que prevén dificultar o prohibir el intercambio de semillas en un futuro. Para ello, los organizadores invitan a todas las asociaciones de lucha por la protección de la libertad de circulación de las semillas, pero también a jardineros, agricultores y a todas las personas interesadas en el tema, al evento, donde además podrán obtener variedades gratuitas de semillas.
El evento, que tendrá lugar en la ciudad de Bruselas el domingo 17 de abril de 2011, tratará la semilla como un elemento esencial para la alimentación y para la conservación de la biodiversidad. La organización del evento pretende ser un escaparate de ideas y experiencias, de debates, talleres… siempre en torno a la temática central de la semilla.
"Con este intercambio de semillas queremos llamar la atención sobre esta práctica que durante los últimos años está despareciendo en toda Europa y que podría ser declarada ilegal por las leyes de la UE", indica la organización. Activistas de la India, Turquía y otros países europeos expondrán la situación de las semillas en sus países y las posibles consecuencias de las nuevas leyes de semillas previstas por la EU.
Para aquellos interesados en formar parte de la nueva red internacional, el lunes 18 se celebrará un encuentro en el que se profundizará en la organización de la asociación.
Sobre el intercambio de semillas en España: Cultiva boodiversidad, siembra tus derechos
http://www.ladyverd.com/index.htm
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